La colección está conformada por documentos vinculados a las actividades comerciales, a fines del siglo XIX, de la familia Velezmoro Porturas, propietarios de la hacienda Araqueda, ubicada en la provincia de Cajabamba, en el departamento de Cajamarca.
Esta colección inédita reúne 176 documentos entre:
La colección hacienda Araqueda es importante porque ofrece un acercamiento a las elites regionales en el Perú a fines del siglo XIX; en este caso particular la documentación es útil para apreciar los vínculos comerciales de la familia Velezmoro Porturas en el departamento de Cajamarca.
Los documentos permiten apreciar los vínculos de la hacienda con la ciudad de Trujillo, la actividad minera en Algamarca, el control sobre los peones, la diversidad de productos que eran obtenidos en la hacienda, entre otros temas.
Incluso hay documentos interesantes como el desarrollo de una epidemia de disentería en la misma hacienda, transmitida al parecer a través de la leche de las vacas, que generó preocupación y motivó el pedido urgente de remedios y médicos provenientes de la ciudad de Trujillo.
La colección Hacienda Araqueda fue donada a la Biblioteca Central por el bibliófilo y abogado peruano Jorge Zevallos-Quiñones Pita en el año 2010.
Araqueda es una región que está ubicada aproximadamente a unos 2668 m.s.n.m. en el distrito de Cachachi, provincia de Cajabamba, al sur del departamento de Cajamarca. Antiguamente fue una rica hacienda propiedad de doña Francisca Velezmoro. Además, Francisca Velezmoro no solo fue la propietaria original de la hacienda Araqueda, sino también de las minas de Algamarca ubicadas al interior de los terrenos de la hacienda. El ingeniero Fermín Málaga Santolalla, junto al químico francés Pedro Hugón, construyeron una planta de lixiviación que funcionó entre 1848 y 1854; esa llegó a ser la primera ocasión en la que se implementó esta técnica moderna para el tratamiento de los minerales en el Perú.
Durante la época de la emancipación, la hacienda Araqueda pasó a propiedad de Miguel Escalante Velezmoro. Posteriormente, durante la guerra con Chile, en 1882, la hacienda sirvió como refugio para las fuerzas chilenas tras la derrota sufrida en la batalla de San Pablo. Araqueda fue hacienda como tal hasta la promulgación de la Ley de la Reforma Agraria durante el gobierno militar del general Juan Velasco Alvarado (1968-1975).